El 8 de julio, con el presidente estadounidense Trump cambiando la fecha límite de los aranceles al 1 de agosto y ajustando las tasas arancelarias impuestas a países como Japón y Corea del Sur, varias economías asiáticas dependientes de las exportaciones obtuvieron más tiempo para negociar, pero casi no hubo alivio. Esta prórroga mantiene a varios países en el punto de mira de los aranceles del gobierno estadounidense, y lo que complica aún más las negociaciones es que EE. UU. podría imponer aranceles sectoriales a productos clave de industrias como la automotriz, de semiconductores y farmacéutica, que son pilares económicos en varios países asiáticos. James Halse, CEO y CIO de Senjin Capital, afirmó: "Si estos aranceles persisten, es probable que tengan un impacto negativo significativo en las empresas japonesas que exportan a EE. UU., especialmente en los fabricantes de automóviles. Este efecto negativo podría transmitirse a lo largo de la cadena de suministro, afectando a aquellos proveedores japoneses que, aunque no exportan directamente a EE. UU., suministran a estas empresas."
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El 8 de julio, con el presidente estadounidense Trump cambiando la fecha límite de los aranceles al 1 de agosto y ajustando las tasas arancelarias impuestas a países como Japón y Corea del Sur, varias economías asiáticas dependientes de las exportaciones obtuvieron más tiempo para negociar, pero casi no hubo alivio. Esta prórroga mantiene a varios países en el punto de mira de los aranceles del gobierno estadounidense, y lo que complica aún más las negociaciones es que EE. UU. podría imponer aranceles sectoriales a productos clave de industrias como la automotriz, de semiconductores y farmacéutica, que son pilares económicos en varios países asiáticos. James Halse, CEO y CIO de Senjin Capital, afirmó: "Si estos aranceles persisten, es probable que tengan un impacto negativo significativo en las empresas japonesas que exportan a EE. UU., especialmente en los fabricantes de automóviles. Este efecto negativo podría transmitirse a lo largo de la cadena de suministro, afectando a aquellos proveedores japoneses que, aunque no exportan directamente a EE. UU., suministran a estas empresas."